El FC Barcelona sigue buscando soluciones para garantizar un futuro exitoso. Joan Laporta, presidente del club, tenía un plan ambicioso para atraer a una figura clave que serviría como pilar en las elecciones de 2026. Sin embargo, desde Inglaterra le han dado un rotundo "no", truncando sus esperanzas de cerrar su fichaje estrella.
Este revés deja al Barça sin un líder que podría haber revolucionado su estructura deportiva. La prioridad de Laporta era contratar a un profesional de renombre que asumiera el rol de manager y ofreciera estabilidad tanto en el campo como fuera de él. Sin embargo, las negociaciones no llegaron a buen puerto, y el candidato ha decidido continuar con su actual proyecto.
Mientras tanto, Hans-Dieter Flick, exseleccionador alemán, también puede respirar tranquilo. Aunque su cargo parecía en peligro hace unos meses, las aguas han vuelto a la calma, y no hay movimientos para sustituirlo a corto plazo. Su posición no está en entredicho, algo que el propio entrenador agradeció mientras prepara nuevos retos con su equipo nacional.
Flick es el técnico ideal
En el primer año de Flick, el Barça recupera su mejor nivel, va líder en LaLiga y ha ganado por goleada a rivales como el Bayern o el Real Madrid. El club azulgrana quiere repetir éxitos con el técnico alemán, a quien ven ideal para ganar títulos. Además el trabajo que está haciendo Hansi Flick en la cantera se valora mucho, con la presencia de algunos como Marc Casadó, que ha explotado bajo sus órdenes.
El protagonista de esta historia, clave para el plan de Laporta, no es otro que uno de los técnicos más influyentes de la última década. Desde Inglaterra, su club ha confirmado su intención de renovar su contrato, garantizando su permanencia en la Premier League. Este movimiento no solo reafirma su importancia, sino que también deja claro que no tiene intención de abandonar el proyecto que lidera.
¿De quién se trata?
No fue hasta hace poco que se conoció la identidad del gran deseo de Laporta, Pep Guardiola. El técnico catalán, considerado una leyenda en el Camp Nou, era el primer elegido para liderar el nuevo Barça desde un rol más amplio, como un manager general. Joan Laporta soñaba con devolver a Josep Guardiola al club para revolucionar su estructura deportiva, algo que habría sido un golpe de efecto electoral de cara a 2026.
Sin embargo, Guardiola, ahora en el Manchester City, ha reafirmado su compromiso con el equipo inglés. Su renovación lo aleja aún más del Barça, desilusionando a los aficionados que esperaban su regreso. Guardiola ha decidido ampliar su contrato y lo hizo además con una cláusula para que no pueda irse del Manchester City, ni siquiera aunque fuesen descendidos de categoría.
Laporta busca alternativas
Joan Laporta deberá buscar nuevas alternativas para su proyecto, mientras Pep Guardiola sigue construyendo su legado en Inglaterra. Por ahora, Hansi Flick y otros entrenadores europeos pueden respirar tranquilos: el mercado no les pasará factura en el corto plazo. El presidente catalán sueña con unir a Deco y Guardiola, dos figuras que además las ve perfectas para trabajar en conjunto.
Guardiola no quiere volver a la ciudad condal, se ve más en un banquillo de selecciones o algún proyecto más a corto plazo. El City será su última gran aventura en un banquillo salvo sorpresa, entiende que lo conseguido es inmejorable.