El FC Barcelona cayó con claridad en su visita al Signal Iduna Park. El conjunto azulgrana fue superado por el Borussia Dortmund en un duelo que dejó más sombras que luces. El marcador final, un 3-1 que reflejó fielmente lo visto sobre el césped, sirvió para que Hansi Flick sacara algunas conclusiones muy relevantes.
Una de ellas fue inmediata y rotunda: Pedri González es absolutamente intocable. El canario no participó en el encuentro y su ausencia fue más que notoria. El técnico alemán, que ya le considera una pieza básica en su proyecto, lo tiene aún más claro tras esta dolorosa derrota.
El partido sirvió para desnudar las carencias del equipo culé cuando el futbolista de Tegueste no está en el campo. El control del juego, la pausa en los momentos clave y la calidad en la toma de decisiones se esfumaron. El centro del campo del Barça fue dominado con facilidad por los alemanes, que aprovecharon cada desajuste para hacer daño.
Pedri, el motor silencioso del Barça
La importancia de Pedri va mucho más allá de lo que reflejan las estadísticas, con él sobre el terreno de juego, el equipo gana equilibrio, criterio y personalidad. Cuando no está, como ocurrió en Dortmund, los errores se multiplican y el rival lo nota. Flick lo sabe, y el partido en Alemania ha sido la confirmación definitiva de una sensación que ya tenía.
El técnico alemán en esta temporada como entrenador del FC Barcelona, una de sus primeras decisiones apuestas fue no prescindir nunca del centrocampista canario. De hecho, desde su llegada ya ha transmitido a la dirección deportiva que la salud y el rendimiento de Pedri deben cuidarse al máximo. Sabe que en torno a él gira buena parte del fútbol del equipo.
Un aviso para el resto del equipo
Con solo 21 años, Pedri se ha ganado el respeto de entrenadores, compañeros y rivales. Su madurez futbolística, su lectura del juego y su influencia en el colectivo son de otro nivel. No es casualidad que figuras como Xavi Hernández o Luis Enrique lo consideraran indispensable, Flick, ahora, también se suma a esa lista.
La derrota ante el Dortmund deja tocado al Barça, pero también ofrece una oportunidad para ajustar piezas. El técnico alemán ha comprobado de primera mano quiénes responden en los partidos de máxima exigencia… y quiénes no. Varias actuaciones individuales dejaron mucho que desear, especialmente en el centro del campo y la defensa.
La figura de Pedri se eleva como un faro en medio de la tormenta, su ausencia fue la gran diferencia en un equipo sin ideas, sin ritmo y sin liderazgo. Flick ha tomado buena nota, y salvo lesión, el canario será indiscutible en cada partido importante. El Barça ya prepara su próximo compromiso con la esperanza de recuperar a su jugador más influyente, porque si algo ha quedado claro en Dortmund es la importancia del canario.