Poco le ha durado al Barça la alegría de Dortmund tras otro frenazo en seco ante el Leganés en Montjuic. Un Barça que se encuentra en su peor momento futbolístico de la temporada deberá asumir responsabilidades para poder seguir adelante. Empieza la fase clave de la temporada donde los azulgranas ya se empiezan a jugar títulos importantes y Flick debe revertir una situación delicada.
La mala racha se alarga en el mes de diciembre.
Los azulgranas solo han conseguido puntuar en tres ocasiones y solamente sumando 5 puntos de 18 posibles, datos que empiezan a preocupar en ‘Can Barça’. La derrota ante el Leganés ha encendido una alarma para lo que queda de año.
Una mala racha que llega justamente en uno de los tramos clave de la temporada, donde el Barça en menos de 3 semanas se irá a jugar la Supercopa de España. Un trofeo que en el club se le ha dado un gran valor y que no ganarlo sería una decepción grande para todos los culés. Ahora la pelota está en el tejado de Flick, el cual después de ilusionar a todos los culés tiene que dar un golpe sobre la mesa y revertir una situación delicada.
Diagnóstico de la realidad culé.
Y es que parece que los primeros meses eran un espejismo de un equipo que daba miedo de verdad después de tantos años de sufrimiento. La realidad es otra, ni antes eran tan buenos ni ahora son tan malos. El fútbol es tan simple que a veces se vuelve totalmente impredecible.
Es curioso como al principio de temporada el club azulgrana se encontraba con numerosas bajas en todas las posiciones, y aun así sacaba resultados excelentes en campos muy difíciles históricamente. En cambio, ahora con todo el fondo de armario disponible tiene más problemas para solucionar los partidos y la mayoría de ellos se le hacen cuesta arriba al equipo de Flick.
En la planificación de la temporada y según varios medios importantes del país, HansiFlick pidió al menos un lateral de garantías y un extremo para hacer competencia. Jugadores como Balde o Raphinha están sin un sustituto claro en su posición, eso hace que la relajación para algunos sea más propensa a aparecer.
En el caso del brasileño parece que no afecta, ya que el jugador se está marcando una temporada de excelencia pura. Además, es el que más se esfuerza de la plantilla, algo que para Flick es absolutamente indispensable.
El bajón y la relajación de varios jugadores es claro, y es el primer problema del otro que hay.
Pies en suelo y a volver a ganar.
Un equipo que ganó a Bayern, a Madrid y que ganaba todos sus partidos con goleadas no podía ser un equipo sin puntos débiles. En este caso el exceso de confianza y sobradez parece que ha afectado más de lo que se pensaba a un equipo que en realidad se estaba construyendo.
Asimilar la realidad y tener los pies en suelo para ganar cosas grandes en un equipo que seguro es capaz de lograr todos los títulos posibles esta temporada.