La lesión de Jules Koundé dejó al FC Barcelona sin su lateral derecho titular justo en un momento clave de la temporada. Con varios frentes aún abiertos y la platilla limitada por las restricciones económicas, Hansi Flick debía buscar alternativas internas para cubrir esa vacante. La opción más lógica parecía ser Héctor Fort, uno de los canteranos más prometedores de La Masia y perfil natural para esa banda.
Sin embargo, Fort sigue sin contar con la plena confianza del entrenador alemán y su cuerpo técnico. A pesar de las expectativas, no ha sumado los minutos que muchos esperaban y su papel se ha visto reducido a la suplencia. La necesidad de un recambio para Koundé parecía abrirle una puerta grande, pero Flick sorprendió con una decisión inesperada que podría cambiar por completo el panorama para ambos jugadores culés.
La gran sorpresa de Flick
El elegido para ocupar el lateral derecho fue Eric García, una apuesta que nadie anticipaba. En el duelo ante el Mallorca, el central catalán ocupó esa banda por primera vez como azulgrana, y cumplió con creces. No solo se mostró sólido en defensa, sino que tuvo protagonismo en ataque, asistiendo el gol decisivo y mostrando una polivalencia que encajó perfectamente en el planteamiento de Hansi Flick.
El entrenador alemán ha encontrado en Eric un nuevo 'comodín' táctico, y esa misma fórmula quedó comprobada frente al Inter. Su capacidad para adaptarse a diferentes posiciones recuerda a la de Sergi Roberto en sus mejores tiempos, y en un Barça con recursos limitados, eso tiene un valor muy grande. Flick ya lo había blindado durante el mercado de invierno, y ahora esa confianza comienza a dar sus frutos dentro del campo.
Golpe definitivo para Héctor Fort
Quien ha salido peor parado de esta decisión es, sin duda, Héctor Fort. El canterano había trabajado para ganarse una oportunidad, pero la reconversión de Eric García ha sido un golpe duro para sus aspiraciones. El mensaje desde el banquillo es claro: Flick no lo considera preparado para asumir un rol protagonista, ni siquiera en situaciones de emergencia.
El club, consciente de que la falta de minutos puede frenar su evolución, ya se plantea opciones para su futuro. Se estudia una cesión a un equipo de Primera División o incluso una venta con opción de recompra, buscando asegurar que el jugador tenga continuidad. Todo ello sin cerrar del todo la puerta a un regreso futuro, sabiendo que el contexto actual no le favorece.