Dani Olmo afronta el arranque de la nueva temporada con la ilusión de seguir aportando su calidad y experiencia al FC Barcelona. El internacional español fue uno de los fichajes más importantes en el último mercado y, desde su llegada, ha demostrado una gran capacidad para adaptarse al estilo de juego culé. Su técnica, visión y capacidad para asociarse lo convierten en un recurso muy valioso para cualquier planteamiento que busque dinamismo en el ataque.
En el cuerpo técnico hay plena confianza en sus cualidades, y Flick sabe que cuenta con un futbolista capaz de marcar diferencias. Sin embargo, el nuevo curso trae consigo desafíos importantes para todos los jugadores de un equipo que busca competir por todos los títulos posibles, con especial atención en la Champions League. El regreso a La Liga supone el primer paso para un año cargado de exigencia.
Flick perfila su once para el debut
Con el inicio de la competición a la vista, Flick ya tiene bastante clara la alineación para el primer partido frente al RCD Mallorca. La portería estará en manos de Joan García, mientras que en defensa, Balde y Koundé ocuparán los laterales. Cubarsí, por su parte, se perfila como el nuevo líder tras la marcha de Íñigo Martínez y Christensen parte con ventaja para acompañarlo, aunque Araújo se mantiene como alternativa sólida.
En el centro del campo, Pedri y De Jong serán los encargados de dar equilibrio y creatividad, además de conectar con el ataque culé. Este volverá a contar con Raphinha, Lewandowski y Lamine Yamal como referencias. La novedad más destacada será la presencia de Fermín López en la media punta, que ha aprovechado la pretemporada para ganarse la confianza del entrenador con actuaciones decisivas.
Olmo, de inicio en el banquillo
En este primer encuentro, Dani Olmo comenzará como suplente, una decisión que responde más a la planificación de Flick que a un cambio drástico en la consideración hacia el jugador. El técnico alemán quiere gestionar de forma equilibrada las cargas de trabajo, especialmente con los futbolistas que han tenido problemas físicos en el pasado.
Para Olmo, esto supone un reto: aprovechar al máximo los minutos que tenga para dejar claro que puede ser titular de forma regular. Su experiencia en grandes escenarios y su capacidad para jugar en distintas posiciones ofensivas le dan muchas opciones para recuperar protagonismo en el once inicial a lo largo de la temporada.