Un joven con cabello rubio platinado observa pensativo con el escudo del Chelsea de fondo sobre un diseño verde.

Ni Liverpool, ni Chelsea, ni Arsenal, solo quiere jugar con Lamine: El Barça lo ficha

La joven joya del club catalán está siendo clave en las próximas decisiones que respectan al mercado

El Barça continúa trabajando para reforzar su plantilla de cara a la próxima temporada, y una de las prioridades de Hansi Flick es sumar un nuevo extremo para completar su ataque. Con Raphinha asentado en banda derecha y la irrupción de Lamine Yamal como titular indiscutible, el club considera fundamental incorporar una pieza que aporte desequilibrio por las bandas. Más aún sabiendo que Hansi Flick ha solicitado tener más alternativas tácticas de garantías.

En ese escenario, Deco ha manejado varias opciones. Durante semanas, el nombre de Luis Díaz fue considerado como el refuerzo ideal: experiencia, desborde y gol. Sin embargo, el contexto interno ha cambiado sabiendo que las voces del vestuario también cuentan, y la de Lamine Yamal en particular ha inclinado la balanza en la toma de decisiones.

Toma la delantera

En el Barça ya se da por hecho que Nico Williams es ahora la opción número uno para reforzar el extremo izquierdo. Lamine Yamal ha sido clave en ese cambio de planes: mantiene una excelente relación con el jugador del Athletic Club, con quien ha formado una sociedad brillante en la Selección Española. Su deseo de compartir delantera con él ha sido escuchado en los despachos, y tanto Joan Laporta como Deco lo tienen muy en cuenta.

La operación, además, resulta más accesible desde el punto de vista económico. La cláusula de rescisión de Nico Williams es de 60 millones de euros, y su voluntad de jugar en el FC Barcelona podría facilitar los términos del acuerdo. En cambio, Luis Díaz sigue siendo una opción muy costosa —exigen 80 millones— y con una negociación mucho más compleja, de modo que se va quedando atrás en las prioridades.

Un ataque joven y complementario

Desde el cuerpo técnico, Flick ve con buenos ojos la llegada de Nico Williams. Su velocidad, su capacidad de desborde y su entendimiento con Lamine encajan perfectamente en el estilo que quiere imponer. Ambos extremos aportarían frescura, profundidad y serían una amenaza constante para las defensas rivales.

El Barça ya trabaja para cerrar el fichaje de Nico lo antes posible.La dirección deportiva es consciente de que puede ser una oportunidad única para consolidar un tridente ofensivo con sello propio.