El Barça ha dado un bajón considerable en el mes de noviembre tras tres meses de gran rendimiento por parte de los de Hansi Flick. Un nivel extraordinario que ilusionó a absolutamente todos los culés.
Noviembre de pesadilla en 'Can Barça'.
Un mes de noviembre con solamente 4 partidos, tres de liga y uno de Champions dónde el Barça ha ganado solamente uno.
Los azulgranas empezaron a perder el control de los partidos a partir de la segunda parte ante el Espanyol, donde el equipo se vio afectado por un exceso de confianza. Un exceso de confianza que permaneció en San Sebastían ante la Real Sociedad donde el equipo ya perdió puntos importantes. Ante Celta y Las Palmas los de Flick no tuvieron la confianza suficiente para rematar los partidos y perdieron hasta 5 puntos más para regalar en bandeja el liderato al Madrid.
Una defensa en fuera de juego.
Los de Flick se presentan en el mes de diciembre sin margen de error y con asignaturas pendientes a corregir. Una de ellas es la tarea defensiva. Un equipo que hasta hace poco anulaba a los equipos con una línea defensiva muy adelantada que hacía estar a los delanteros de los equipos rivales en permanente fuera de juego.
Esa gran ventaja parece que ya la han calado varios equipos de la Liga EA Sports, y juegan de tú a tú ante un Barça falto de aciertos en las áreas. Parece que el bajón ha afectado bastante a jugadores como Koundé o Balde, quiénes estaban a un nivel sublime antes del mes de noviembre. Dos jugadores clave para poder tirar las líneas tan adelantadas del fuero de juego y dejar en jaque a los delanteros rivales.
No se puede fallar más.
El Barça se presenta al mes de diciembre con 8 puntos perdidos de 9 posibles en Liga, algo que el Real Madrid ha sabido aprovechar. Ahora los de Flick tiene una tarea muy importante y complicada. La tarea es no perder más hasta al menos el inicio de la segunda vuelta en Liga.
Con el pase directo a octavos de final casi asegurado, el Barça se debe centrar en la competición de la regularidad. Un Barça que deberá visitar al Betis y al Mallorca en su casa. Estadios dónde siempre le ha costado sumar de tres al cuadro azulgrana.
Todo esto teniendo en cuenta que el Barça ya se ha quitado de encima casi todas las salidas complicadas a domicilio. En la segunda vuelta a los de Flick solo les quedará visitar el Wanda, San Mamés y el campo del Espanyol como salidas más complicadas.