El Atlético de Madrid y el FC Barcelona se vieron las caras en un vibrante partido de Copa del Rey. Pero más allá del espectáculo en el terreno de juego, en los despachos también hubo mucho movimiento. Enrique Cerezo aprovechó la ocasión para sentarse con Joan Laporta y Deco con un objetivo muy claro: retener a un jugador que ha sorprendido gratamente en el Metropolitano.

El futbolista en cuestión llegó al Atlético como solución de urgencia, sin generar grandes expectativas. Sin embargo, ha aprovechado las lesiones en la defensa colchonera para ganarse un sitio en el once de Simeone, demostrando que sigue teniendo nivel para competir al más alto nivel.
En el Atlético están encantados con su rendimiento, y el 'Cholo' ha dado el visto bueno para que el club negocie su fichaje definitivo una vez termine su cesión en junio. Sin embargo, el gran obstáculo es el precio que el Barça exige para su traspaso.

Una oferta decepcionante para el Barça
El Barcelona, que busca hacer caja en verano para equilibrar sus cuentas, está dispuesto a vender al jugador, pero esperaba recibir una oferta considerablemente mejor. En su momento, el club pagó 36 millones de euros por él, y aunque es evidente que no podrá recuperar una cifra similar, sí aspira a ingresar al menos 10 millones.

El problema es que la oferta inicial del Atlético de Madrid ha sido muy inferior a las expectativas culés. El club rojiblanco ha puesto sobre la mesa solo 7 millones de euros, una cifra que Laporta y Deco han rechazado de inmediato.
El Barça considera que el jugador sigue teniendo mercado en Europa, y que podrían obtener una cantidad mayor si negocian con otros clubes interesados. Sin embargo, el Atlético confía en llegar a un acuerdo, ya que el futbolista no entra en los planes de Flick y el Barça está priorizando hacer caja.

El Barça se mantiene firme: pide 10 millones
El Barça no quiere regalar al jugador y ha comunicado al Atlético que solo aceptará ofertas a partir de los 10 millones. La diferencia entre ambas posturas no es demasiado grande, por lo que se espera que en las próximas semanas las negociaciones puedan desbloquearse.
El futbolista, por su parte, se siente cómodo en Madrid y estaría encantado de continuar a las órdenes de Simeone. Sabe que en el Barça no tiene futuro, así que todo apunta a que su destino será el Atlético de Madrid, siempre y cuando los colchoneros acepten subir su oferta.

El Barça busca aligerar su plantilla
Esta operación se enmarca dentro de la estrategia de Deco y Laporta de reducir la masa salarial y generar ingresos para la próxima temporada. Además del protagonista de esta historia, el club también está buscando salida para otros jugadores que no entran en los planes de Flick, como Vitor Roque, Ferran Torres o Pablo Torre.
El Barça no puede permitirse más cesiones sin obtener beneficios económicos, por lo que esta vez exigirá dinero por sus descartes. Si el Atlético quiere quedarse con el jugador, deberá subir su oferta hasta los 10 millones. Una cifra que, si bien está lejos de los 36M que pagó el Barça en su día, al menos le permitirá recuperar parte de su inversión .

El central francés, que en su día llegó al Barcelona procedente del Sevilla, ha resurgido en el Atlético de Madrid, donde Simeone ha sabido potenciarlo. Aunque su paso por el Camp Nou estuvo lleno de altibajos, en el Metropolitano ha encontrado continuidad y confianza, lo que ha permitido que vuelva a brillar.
Ahora, el Atlético quiere quedárselo en propiedad, pero el Barça no lo soltará por menos de 10 millones. En las próximas semanas se definirá su futuro, pero todo apunta a que Lenglet seguirá vistiendo de rojiblanco, siempre y cuando su club actual esté dispuesto a aumentar su oferta.