Joan Laporta tiene entre ceja y ceja un objetivo muy claro: devolverle al FC Barcelona una imagen de grandeza que se ha ido diluyendo en los últimos años. Uno de los puntos clave de este plan pasa por revitalizar el dorsal más icónico del club, el número 10. Tras la salida de Messi, ningún jugador ha logrado llenar ese vacío, ni siquiera un prometedor Ansu Fati que fue víctima de las lesiones y la presión desmedida.
Ahora, el presidente del FC Barcelona quiere poder dar un golpe sobre la mesa y rendir homenaje al astro argentino a través de su heredero natural: Lamine Yamal. El joven extremo, que ya ha enamorado al barcelonismo con su talento precoz, está llamado a ser la nueva cara visible del proyecto deportivo culé. Y Laporta no quiere dejar pasar la oportunidad de vincular su figura con la del mejor jugador de la historia del club.

La propuesta ya ha sido conversada con Nike, que también ve con buenos ojos esta jugada estratégica, para la marca norteamericana, el dorsal 10 es una herramienta de marketing muy poderosa. Sin embargo, exigen que el portador del número tenga minutos, protagonismo y continuidad, no puede ser un jugador de banquillo o de perfil bajo. Como sucedió en el tramo final de Ansu Fati, el 10 tiene que estar en el campo y brillar.
Flick le ha dado más galones
Lamine Yamal cumple con todos los requisitos, a pesar de su juventud, ha demostrado una madurez impropia de su edad. Hansi Flick le dio galones esta temporada y el canterano respondió con desparpajo, desequilibrio y actuaciones determinantes tanto en Liga como en Champions. Además, su estilo de juego, encarador y eléctrico, encaja a la perfección con el simbolismo del dorsal.
Joan Laporta es consciente de que asignarle el 10 a Yamal no solo fortalecería su imagen de futuro crack mundial, sino que también sería un guiño nostálgico a la era Messi. Un gesto que, sin decirlo explícitamente, permitiría al club reconectar emocionalmente con una afición que todavía añora al argentino. Las razones extradeportivas obligan al club azulgrana a tomar una decisión urgente sobre el dorsal.
El 10 del Barça
Y no se trata únicamente de una cuestión estética o comercial. En los despachos del Camp Nou consideran que Yamal está preparado para asumir esta responsabilidad. La próxima temporada será clave para consolidarlo como una estrella global, y el número 10 podría ser la palanca que catapulte su imagen.
Aunque no hay confirmación oficial, todo apunta a que el cambio se haría efectivo antes del inicio de la temporada 2025/26. El Barça ya trabaja en campañas promocionales y acciones de marketing en torno al nuevo "10", mientras en redes sociales crece la expectación. Con 17 años está preparado para llevar el dorsal más importante en el club azulgrana.
Laporta quiere que el retorno del espíritu Messi sea una realidad, al menos en forma de legado. No se espera que Leo vuelva a jugar en el club, pero sí que se le rinda un homenaje a la altura de su figura. Y qué mejor forma de hacerlo que entregándole su dorsal a un joven talento de La Masía que ha nacido para marcar una época.