La dirección deportiva del FC Barcelona ya ha tomado una decisión clara respecto al futuro de Andreas Christensen. El central danés, que llegó libre desde el Chelsea en 2022, no entra en los planes de Hansi Flick para la próxima temporada y su continuidad en el Barça es difícil. Las constantes lesiones han sido un problema para el defensor, que en los últimos meses apenas ha podido sumar minutos con el equipo.
Aunque su rendimiento ha sido notable cuando ha estado disponible, la falta de continuidad ha llevado al cuerpo técnico y a la directiva a optar por su salida. El club azulgrana necesita aliviar la masa salarial y generar muchos ingresos, lo que convierte a Christensen en una de las primeras opciones en la lista de transferibles.

Desde la cúpula blaugrana, encabezada por Joan Laporta, consideran que lo mejor para todas las partes es buscarle un nuevo destino. Se trata de un jugador con cartel en el mercado, especialmente en la Premier League de Inglaterra, donde dejó un gran recuerdo tras su paso por el Chelsea. Tal es así que algunos de los equipos de ese país ya se han dirigido al agente del futbolista para consultar por su situación.
Manchester United y Nottingham Forest, al acecho
El club ya sabe que algunos clubes han mostrado interés en hacerse con los servicios del danés, y entre ellos destacan dos nombres: Manchester United y Nottingham Forest. Ambos clubes ven con buenos ojos su incorporación, aunque por razones muy diferentes. El United, que busca reforzar su defensa tras una temporada irregular, considera a Christensen una opción fiable para fortalecer su retaguardia.
Amorim valora su experiencia y solvencia táctica, y en Old Trafford no descartan lanzar una oferta en las próximas semanas. Por otro lado, el Nottingham Forest, que quiere consolidarse en la Premier League, estaría dispuesto a ofrecerle un papel protagonista en su zaga. Para el Forest, que apunta a jugar la Champions, podría ser una oportunidad perfecta para los del City Ground.
Una operación necesaria para el Barça
El FC Barcelona no solo busca hacer caja con la venta del danés, sino que también pretende liberar mucho espacio en su masa salarial para acometer nuevas incorporaciones. Hansi Flick quiere cambios y el equipo sufrirá una profunda reestructuración, el entrenador alemán ya ha dejado claro que su defensa necesita variantes importantes.
La salida de Christensen supondría una inyección económica para la entidad, que todavía sigue lidiando con los problemas del Fair Play Financiero. Su marcha permitiría dar más oportunidades a jóvenes como Pau Cubarsí y facilitaría la llegada de otro zaguero con mayor regularidad física.
Aunque todavía no hay una oferta formal sobre la mesa, el futuro de Christensen parece estar lejos del Camp Nou. Su regreso a Inglaterra es solo cuestión de tiempo, y en las próximas semanas su destino podría quedar sellado. Ter Stegen se lleva una sorpresa desagradable, es uno de sus grandes amigos y esperaba volver a jugar junto a él.