Un jugador de fútbol con peinado de rastas rubias aparece frente al escudo del FC Barcelona sobre un fondo verde con diseño de puntos.

19 años, mejor que Nico Williams: La gran revelación de Europa solo quiere ir al Barça

Flick y la dirección deportiva se enfrentan a una encrucijada en el ataque

La temporada del Barça está siendo notable, pero hay áreas que generan consenso interno sobre la necesidad de reforzarse. Una de ellas es la posición de extremo. Hansi Flick ha sido claro: el equipo necesita más desequilibrio por banda.

Con Lamine Yamal asentado y Raphinha firmando su mejor campaña como azulgrana, el sector derecho parece cubierto. Pero por la izquierda la situación es muy distinta.  Ferran Torres ha sido irregular y Ansu Fati no entra en los planes de futuro.

Jugadores de fútbol con uniformes verdes en el campo durante un partido.
Lamine y Raphinha celebrando un gol | @FCBarcelona

Nico Williams, cada vez más lejos

Durante meses, Nico Williams fue la gran prioridad. Encajaba por perfil, edad, estilo de juego y hasta por afinidad con varios jugadores del vestuario. Su nombre ha estado subrayado en todas las listas internas.

Sin embargo, las opciones de ficharlo se han reducido notablemente. Su cláusula de 58 millones sigue vigente, pero las pretensiones salariales y la competencia de la Premier lo alejan del Camp Nou.  Además, su deseo de ser titular indiscutible complica cualquier posible negociación.

Un jugador de fútbol con una chaqueta azul con detalles en rojo, amarillo y negro, y una camiseta roja, saluda con la mano levantada.
Nico Williams con la selección | @nicolas_williams9

Otra de las opciones que más ilusionaba era Rafael Leão. Su potencia, su capacidad de gol y su desequilibrio habrían encajado perfectamente en el esquema de Flick. Pero su precio de salida es inasumible.

El Milan no lo dejará salir por menos de 100 millones.  Y con la actual situación financiera del Barça, esa cifra está completamente fuera del radar. El portugués es, a día de hoy, un objetivo irreal.

Rafael Leao con la camiseta del AC Milan celebrando en el campo
Rafael Leão con el AC Milan | @iamrafaeleao93

El mercado obliga a mirar hacia otra dirección

Con las dos opciones más sonadas prácticamente descartadas, en el Barça han comenzado a explorar alternativas menos mediáticas. Jugadores jóvenes, con proyección, capaces de crecer dentro del proyecto azulgrana. Es el tipo de perfil que busca Deco.

En las últimas semanas, un nombre ha ganado peso dentro de esa categoría. No estaba en la agenda al inicio de temporada. Pero su irrupción ha sido tan potente que ya figura como una opción real para reforzar las bandas.

Deco charlando con un micrófono en la mano en una rueda de prensa del FC Barcelona.
Deco | FC Barcelona

El contexto es favorable. El jugador ha empezado a tener minutos en uno de los clubes más exigentes del continente. Y los ha aprovechado con creces.

Su velocidad, su capacidad para el uno contra uno y su confianza han llamado la atención de varios ojeadores del Barça. La dirección deportiva considera que su fichaje podría seguir el modelo de apuestas recientes como Pedri, Cubarsí o Lamine.

Un hombre con chaqueta deportiva negra señalando hacia adelante con el dedo índice.
Hansi Flick | @FCBarcelona

Proyección internacional y margen de mejora

A sus 19 años, ha dado un paso adelante en su desarrollo. Ha debutado en Premier League, ha sido decisivo en partidos de copa, y ha demostrado que está listo para un salto mayor. Su estilo encaja con lo que pide Flick: desborde, compromiso y energía.

Además, su situación contractual le hace más accesible que otras alternativas. No tiene un salario desorbitado, y su actual club estaría dispuesto a negociar en caso de una oferta razonable. Todo esto lo convierte en una oportunidad estratégica.

El extremo que estudia el Barça es Tyrique George. La perla del Chelsea ha sido una de las grandes revelaciones del fútbol europeo en los últimos meses. Y en el Camp Nou no le quitan el ojo.

Si el Barça no consigue cerrar operaciones grandes, George puede convertirse en el fichaje ideal: joven, talentoso, asequible y con margen para crecer. El dilema de los extremos sigue abierto, pero en Londres podría estar la solución.