Jules Koundé ha revelado los detalles de la rutina que le ha permitido alcanzar un buen nivel, especialmente en la segunda mitad de la temporada. A pesar de un comienzo complicado debido a una lesión de rodilla, Koundé ha demostrado una impresionante recuperación y un buen rendimiento en el campo.
“Siempre he dicho que el primer tramo no fue tan bueno por la lesión de rodilla”, comenta Koundé. “Se curó en 18 días, algo que normalmente lleva cinco semanas”.
Esta rápida recuperación no fue una coincidencia, sino el resultado de una disciplina y un régimen de entrenamiento riguroso.
La rutina de Koundé
Koundé comienza su día a las 7 de la mañana con una sesión de entrenamiento personal antes de dirigirse al club. Allí, realiza el tratamiento de fisioterapia necesario y participa en los entrenamientos programados con el equipo.
Después de la sesión matutina, se queda en el club para comer y se va a casa alrededor de las 15 horas. Pero su día no termina ahí. Por la tarde, realiza otra sesión de entrenamiento con su entrenador personal, una rutina que ha mantenido durante los últimos dos años.
“Desde enero, y después de esta mala racha, me planteé agregar otra sesión para mejorar, y eso se ha convertido en rutina”, afirma Koundé.
Su compromiso es tal que incluso se le ha visto entrenando de madrugada en el club después de regresar de partidos. También participando en los entrenamientos de los suplentes después de sus propias sesiones de recuperación.
Koundé tiene claro que es importante en Barcelona
Koundé no sólo destaca por su dedicación, sino también por su liderazgo en el equipo.
“Soy uno de los jugadores clave del Barcelona, uno de los líderes del vestuario y, sobre todo, soy un jugador fiable”, dice con orgullo.
“Aparte de la vez que Gavi me lesionó la rodilla al chocarme sin querer, no he tenido ni un solo problema físico del que quejarme. Estoy muy orgulloso de ello, porque es el fruto de mucho trabajo”.
Koundé sigue la filosofia de Henry
El defensa también se identifica con las palabras de Thierry Henry: “El trabajo duro y la disciplina son talento”. Koundé reconoce que no se considera rebosante de talento, pero valora que sus esfuerzos dan frutos.
“En el pasado, las veces que me faltó disciplina, a menudo lo pagué con dinero. Ahora veo que mis esfuerzos me recompensan”.
La dedicación y la ética de trabajo de Jules Koundé han sido fundamentales para su éxito personal. Además, también sirven de ejemplo para sus compañeros en el vestuario del FC Barcelona. Su enfoque meticuloso y su compromiso con la mejora constante son testimonio de la mentalidad que se necesita para sobresalir en el más alto nivel del fútbol.