Tras el baño del Barça al Madrid en la final de la Supercopa de España, los de Flick vuelven a Barcelona con los deberes hechos pero con mucho trabajo por delante. Uno de ellos es volver a reengancharse a Atlético de Madrid y Real Madrid en La Liga tras una mala racha que relegó a los azulgranas a la tercera plaza. Y es que el Barça llegaba a Arabia con muchas dudas tras perder su último partido de la primera vuelta ante los ‘colchoneros’ en un partido fatídico para los ‘culés’.
La Supercopa un nuevo impulso.
Ahora los de Flick, tras golear al eterno rival, llegan a Barcelona con otra mentalidad listos para iniciar la segunda vuelta de la temporada. Una segunda vuelta que será muy igualada con tres equipos en racha en la competición doméstica. Algo que inquieta a Flick viendo de lo que son capaces los azulgranas y viendo que su equipo ha dejado escapar hasta 13 puntos clave.
Recordemos que el Barça estaba en octubre a 6 puntos del Real Madrid que era segundo y a 10 puntos del Atlético de Madrid que era el tercero. Los ‘colchoneros’ con una racha histórica de 14 victorias seguidas han podido alcanzar al Barça y además sacar ventaja de 6 puntos.
Todo en manos de los azulgranas.
El Barça es el que ahora debe retomar esa racha y volver a girar la tortilla para ganar una Liga que sería celebrada como nunca. Y sin duda la Supercopa será un punto de inflexión clave en un vestuario herido tras la mala racha en Liga. Una Supercopa llena de polémicas que ha acabado de la mejor manera posible tras las inscripciones realizadas y la consecución del título.
Los jugadores lo han pasado mal estos últimos meses y eso se nota en las celebraciones y en la unidad de un grupo que tiene hambre de ganar.
Un vestuario que está más unido que nunca, con unos canteranos llenos de ilusión tras ganar su primer título con el club de sus amores ¿qué puede salir mal?
Si a esto le sumas el gran rendimiento de todo el equipo en conjunto dentro del terreno de juego te sale una mezcla que podría ser muy exitosa. Y ganar y golear a tu eterno rival en una final da para mucho en el futuro de una temporada. Así que la expectativa es máxima para ver como Flick planea esta importante y decisiva segunda vuelta.