Un futbolista con el uniforme del Barcelona se lleva la mano al rostro mientras mira hacia el frente

Oficial, Marcus Rashford es nuevo jugador del Barça: Lo de su salario es inexplicable

El inglés rompió todos los esquemas del mercado: actitud, experiencia y una decisión que sacude al entorno culé

El FC Barcelona ha logrado un movimiento de mercado que parecía imposible hace apenas unas semanas. Un fichaje exprés, sin filtraciones, sin culebrón y con una actitud que recuerda a los grandes de otra época. Marcus Rashford ha dicho sí al Barça, pero lo más impactante no es su llegada, sino las condiciones del acuerdo.

El internacional inglés era seguido desde hace tiempo, pero su salario y estatus parecían un muro infranqueable. Sin embargo, la voluntad del jugador ha transformado completamente el escenario, acelerando las negociaciones en tiempo récord. Mientras otros esperaban cláusulas, primas y garantías, Rashford ha llegado con un discurso claro: quiere jugar aquí.

El Manchester United no lo ha puesto fácil en ningún momento, ni en lo económico ni en lo institucional. No hubo facilidades, ni cesiones, ni ayuda financiera de ningún tipo desde Old Trafford. Todo apuntaba a una operación inviable, hasta que el jugador dio el paso definitivo que lo cambió todo.

Mucho más que un fichaje

Rashford priorizó el reto deportivo por encima de todo, desmarcándose de la tendencia de los últimos años. El Barça necesitaba algo así: compromiso, ambición y un perfil capaz de asumir responsabilidad en momentos decisivos. Su llegada no responde a una oportunidad de mercado, sino a una voluntad explícita de vestir de azulgrana.

En los despachos del Camp Nou, el gesto ha sido recibido con asombro y agradecimiento por parte del club. No se esperaba una postura tan firme por parte del delantero, especialmente tras años en la élite de la Premier. El jugador ha entendido el contexto del Barça, y ha aceptado condiciones que muchos consideraban imposibles para su estatus.

La comparación es inevitable, porque durante semanas el Barça trabajó para incorporar a un extremo joven, nacional y prometedor. Hubo reuniones, llamadas, e incluso una propuesta formal, pero las condiciones exigidas por su entorno frustraron la operación. Aquel jugador nunca dio el paso que sí ha dado Rashford… ni lo dio, ni lo quiso dar.

Laporta, firme con los que dudan

Desde el primer momento, Laporta dejó clara su postura: sin renuncia, no habría fichaje para nadie. Y mientras algunos jugadores priorizaban cláusulas liberadoras o acuerdos si no eran inscritos, otros simplemente dijeron que no. El Barça optó entonces por mirar a un perfil distinto, más curtido, más competitivo, y con hambre real.

Rashford no pidió quedarse libre si había problemas con la inscripción ni exigió blindajes millonarios. Su único deseo era uno: competir en el Barça, recuperar su mejor versión y volver a sentirse importante. Y por ello aceptó una fórmula que permite al club mantener el control sin asumir riesgos desproporcionados.

Se trata de una cesión con opción de compra, pactada por 30 millones si el inglés convence en el campo. En caso contrario, hay una cláusula de salida que permite al Barça liberarse con una compensación inferior a 10. Una jugada sin apenas riesgo, sellada por una decisión que lo explica todo.

Marcus Rashford cobraba 18 millones de euros anuales en el Manchester United como una de sus estrellas. En el FC Barcelona ha aceptado una rebaja del 30% para cerrar su fichaje sin condiciones. Cobrará 5 millones… menos incluso que Nico Williams, que pedía 20 y nunca dio el paso que sí dio Rashford.