El FC Barcelona se encuentra en un punto de inflexión en su gestión defensiva. Tras el regreso de figuras clave como Ronald Araújo y Andreas Christensen, el equipo dirigido por Hansi Flick enfrenta un exceso de centrales disponibles. Lo que complica las decisiones tácticas y de plantilla para la segunda mitad de la temporada.
Un ‘overbooking’ en la zaga
El inicio de la temporada estuvo marcado por problemas defensivos en el Barça debido a las lesiones de varios jugadores importantes. Sin embargo, con Araújo y Christensen recuperados, y la consolidación de Pau Cubarsí junto a Iñigo Martínez como titulares, el equipo ha encontrado estabilidad.
En este contexto, Eric García, quien tuvo minutos importantes al comienzo de la campaña, ha perdido protagonismo. Su rol en el equipo ha quedado en el aire, lo que ha despertado el interés de otros clubes, como la Real Sociedad.
El conjunto dirigido por Imanol Alguacil busca reforzar su defensa tras la salida de Robin Le Normand. Eric García encaja perfectamente en sus planes, ya que su experiencia y capacidad para sacar el balón jugado se alinean con el estilo de juego del equipo donostiarra.
Según informes, Imanol ha mostrado un interés personal en contar con el defensor catalán y estaría dispuesto a facilitar su llegada a San Sebastián.
Un intercambio que podría traer a un crack al Camp Nou
Lo que hace aún más interesante esta operación es la posibilidad de que el acuerdo incluya a Takefusa Kubo. El extremo japonés, una de las grandes figuras de la Real Sociedad, podría ser parte del trato y aterrizar en el Barça.
Kubo, exjugador de La Masía, tiene una relación especial con algunos jugadores del primer equipo, incluido Dani Olmo, con quien compartió etapas en categorías inferiores. Su incorporación al Barça reforzaría las bandas y ofrecería mayor profundidad al ataque de Flick.
¿Traspaso o cesión?
El Barça está abierto a varias opciones respecto a Eric García. Una de ellas sería su cesión a la Real Sociedad, permitiéndole tener los minutos que Flick no puede garantizarle. Otra posibilidad es un traspaso por 10 millones de euros, una cifra que la Real Sociedad estaría dispuesta a discutir.
En cualquier caso, el objetivo del Barça es aprovechar esta situación para equilibrar su plantilla mientras explora nuevas incorporaciones, como la de Kubo.
La posible llegada de Takefusa Kubo al Barça no solo tiene sentido en términos futbolísticos, sino también emocionales. Su buena relación con Dani Olmo y otros miembros del equipo podría facilitar su adaptación y potenciar la dinámica ofensiva del conjunto azulgrana.
Además, Kubo aportaría desequilibrio y creatividad en las bandas, características que el Barça necesita para diversificar su juego de ataque.
Una operación que beneficia a todos
El intercambio entre Barça y Real Sociedad parece tener beneficios claros para ambas partes. La Real reforzaría su defensa con un central joven y con experiencia internacional. Mientras que el Barça añadiría a un talento prometedor como Kubo, quien encaja en el estilo ofensivo de Flick.
Esta negociación también aliviaría al Barça en términos de gestión de plantilla, permitiéndole dar salida a un jugador con menos protagonismo.
La posible salida de Eric hacia la Real Sociedad, junto con la llegada de Kubo al Camp Nou, representa una jugada estratégica para el Barça. En un mercado de invierno que promete ser agitado, esta operación podría ser el movimiento que equilibre las necesidades deportivas de ambos clubes.