Lo que parecía una gran oportunidad para consolidarse en el primer equipo del Barça ha terminado convirtiéndose en un escenario lleno de incertidumbre. Tras meses de altibajos y una decisión inesperada de Hansi Flick, el futuro de este futbolista en el club azulgrana ha quedado en el aire.
El Sevilla, que está en plena reconstrucción, ha detectado esta situación y ha mostrado un fuerte interés en hacerse con sus servicios. Según fuentes cercanas, García Pimienta ha contactado con la directiva culé para explorar la posibilidad de incorporarlo de cara a la próxima temporada.

Falta de confianza y una competencia inesperada
A principios de temporada, todo apuntaba a que este jugador iba a tener más protagonismo, sobre todo después de la lesión de Marc-André ter Stegen. Sin embargo, sus actuaciones generaron ciertas dudas en el cuerpo técnico, y en el mercado de invierno el Barça decidió fichar un refuerzo en su posición, desplazándolo nuevamente al banquillo.
El nuevo fichaje, con experiencia en la élite, se ha convertido en titular indiscutible en apenas unas semanas, dejando a su compañero sin apenas oportunidades. Esta falta de confianza ha sido clave para que el futbolista empiece a valorar su salida en busca de minutos.

En Nervión buscan reforzar su plantilla para la próxima campaña. Una de las prioridades es asegurar la portería con un guardameta fiable y con buen juego de pies. La apuesta actual del Sevilla no ha convencido del todo, por lo que Pimienta ve en este jugador del Barça la pieza perfecta para su proyecto .
Además, el técnico conoce bien al futbolista, ya que coincidieron en la cantera azulgrana. En su esquema, podría tener un rol protagonista y ganar la continuidad que no ha encontrado en el Barça.
Para el jugador, esta oportunidad representa un reto ideal para seguir creciendo en un equipo con aspiraciones europeas. Con 24 años, su progresión podría verse frenada si sigue sin minutos en el Camp Nou, mientras que en el Sevilla podría consolidarse como titular y demostrar su valía en LaLiga.

El Barça tiene la última palabra
El desenlace de esta historia dependerá tanto del futbolista como del Barça. Su contrato sigue vigente hasta 2026, pero si él mismo solicita una salida, el club deberá decidir si apuesta por una cesión o una venta.

Otro factor a considerar es la situación de Ter Stegen, quien ha tenido problemas físicos recientemente. Si el cuerpo técnico cree que necesita una alternativa de confianza en la plantilla, la salida del jugador podría verse frenada.
Lo cierto es que, tras no aprovechar su gran oportunidad, el futuro de Iñaki Peña en el FC Barcelona es más incierto que nunca. García Pimienta ya ha movido ficha, pero ahora la decisión está en manos del club y del jugador.