El FC Barcelona sigue ajustando su plantilla de cara a la nueva temporada. Tras las incorporaciones de Joan García, Marcus Rashford y Roony Bardghji, Flick tiene a su disposición un grupo muy completo, pero también más amplio de lo que permite la planificación deportiva. En este escenario, Deco tiene la responsabilidad de equilibrar el vestuario y, al mismo tiempo, obtener ingresos por algunas ventas estratégicas.
El director deportivo trabaja codo a codo con Laporta para cuadrar los números sin perder competitividad. La salida de Pablo Torre y Pau Víctor fue apenas el primer paso en la llamada operación salida. Ahora, el reto pasa por decidir qué jugadores tienen cabida en el nuevo proyecto, y cuáles deberán buscar minutos en otros destinos para no ver frenado su desarrollo.
En el radar de la Premier League
Entre los nombres que están sobre la mesa aparece el de Marc Casadó. El canterano fue una de las sorpresas positivas del curso pasado, mostrando personalidad y despliegue físico cuando le tocó asumir responsabilidades en el primer equipo. Su rendimiento ha despertado el interés de varios clubes de la Premier League, como Arsenal, Chelsea y Manchester United, que consideran que su perfil encajaría perfectamente en el fútbol inglés.
Deco sabe que una posible venta de Casadó podría dejar cerca de 40 millones de euros, una cifra que ayudaría al club a cumplir con los requisitos financieros de La Liga. Sin embargo, el jugador todavía no ha dado el visto bueno a una salida. La competencia en la medular será feroz con De Jong, Gavi, Pedri, Dani Olmo, Fermín y Bernal, pero Casadó mantiene la esperanza de ganarse un lugar en la rotación de Flick.
Una decisión que marcará su futuro
En el cuerpo técnico valoran positivamente su trabajo, aunque Flick es consciente de que el joven centrocampista podría tener pocos minutos si decide quedarse. Por eso, Deco ha intentado hacerle ver que una cesión o incluso un traspaso podría ser beneficioso para su carrera a medio plazo. Más aún teniendo en cuenta el interés real desde Inglaterra.
A pesar de las recomendaciones y las oportunidades que le ofrece el mercado, Marc Casadó sigue firme en su deseo de continuar en el Barça. Su entorno insiste en que su objetivo es triunfar de azulgrana y ganarse la confianza de Flick. La decisión final aún no está tomada, pero si se mantiene en el club, el centrocampista afrontará uno de los retos más exigentes de su carrera: competir por un lugar.