Joan Laporta ya no puede ocultar su euforia. El presidente está viviendo uno de los momentos más dulces de su segundo mandato tras una temporada absolutamente brillante. El verano pasado, cuando el equipo estaba hundido anímicamente, con un vestuario dividido y sin rumbo claro, apostó por Flick para tomar las riendas.

El resultado de esa apuesta ha sido inmejorable: el Barça ha conquistado La Liga, la Supercopa de España y la Copa del Rey. Un triplete nacional que pone fin a una sequía de títulos importantes y que consolida el proyecto liderado por Laporta y Flick. El equipo ha mostrado una evolución notable, tanto en el juego como en el carácter, y ha recuperado el respeto de Europa.
Laporta quiere un gran golpe de mercado
Pero la euforia de Laporta no se queda solo en los títulos. El presidente quiere culminar este gran proyecto con un golpe sobre la mesa en el mercado de fichajes. Cree que es el momento ideal para sumar una pieza diferencial que eleve el nivel del equipo y que también ilusione a la afición.
Ese fichaje sería la guinda del pastel, una forma de decirle al mundo que el Barça ha vuelto para quedarse. Laporta quiere repetir el efecto que provocó en su anterior etapa con incorporaciones de renombre, y sabe que este verano es una oportunidad perfecta. A nivel institucional y deportivo, el club ha recuperado la credibilidad y ahora quiere traducirlo en una operación de mercado que refuerce ese mensaje.
El Barça confía en que algunas ventas servirán para fichar
Sin embargo, no será sencillo. El principal escollo al que se enfrenta el Barça es el límite salarial, actualmente excedido. La Liga exige que el club equilibre sus cuentas para poder inscribir a nuevos jugadores, y eso pasa, inevitablemente, por generar ingresos.

En este sentido, una de las opciones que el club no descarta es la venta de Ronald Araujo. El central uruguayo tiene una cláusula de rescisión de 65 millones de euros vigente para este verano. Su salida sería dolorosa, pero permitiría aligerar la masa salarial y acercarse al cumplimiento del fair play financiero.
El fichaje con el que sueña Laporta
Y si hay un nombre que seduce especialmente a Laporta, ese es el de Rafael Leão. Según desvela 'El Nacional', el extremo portugués es el gran deseo del presidente azulgrana para reforzar el ataque. Su potencia, creatividad y olfato goleador encajan perfectamente en lo que busca el club.

Además, cuenta con un aliado clave para esta operación, que es Jorge Mendes. La relación entre Laporta y Mendes es excelente, y esa amistad podría allanar el camino para que Leão vista de azulgrana. Aunque no será una operación sencilla, por el coste y la competencia de otros clubes, en el Barça creen que el fichaje es posible.