El FC Barcelona afronta la cita más decisiva de la temporada. El equipo se juega su pase a la final de la Champions League frente al Inter de Milán. Y lo hace con una sorpresa que ya se comenta en el vestuario.
Hansi Flick ha trabajado toda la semana en silencio. Más allá del plan habitual, hay un detalle que ha levantado la moral del grupo. Un jugador muy importante podría estar disponible de manera inesperada.

Una recuperación que nadie esperaba
Durante las últimas semanas, su nombre había desaparecido del día a día. Una lesión muscular parecía dejarlo fuera de combate para el resto de la eliminatoria. Sin embargo, todo ha cambiado.
La evolución ha sido mucho más rápida de lo previsto. El cuerpo técnico ha observado una mejora significativa en los últimos entrenamientos. Y el propio jugador ha pedido estar presente en el Giuseppe Meazza.

En el entorno del Barça reconocen que su implicación ha sido total. Ha cumplido con cada etapa de la recuperación sin fallos. Incluso ha acelerado los plazos con sesiones extras de fisioterapia y trabajo físico personalizado.
El partido contra el Inter puede marcar un antes y un después. Por eso, su deseo de participar es absoluto, aunque sea desde el banquillo. No será titular, pero podría tener minutos clave en la segunda parte.

Una noticia que corre por el vestuario
La posibilidad de contar con este jugador ha generado una ola de optimismo. Varios futbolistas lo consideran un líder silencioso, alguien que aparece en los momentos clave. Su experiencia y su mentalidad son un activo valioso.
Lamine Yamal, por ejemplo, lo ha comentado con los más cercanos. Sabe que su presencia puede facilitarle espacios en ataque. Tenerlo cerca es un lujo que el joven extremo no quiere desaprovechar.

Flick ha sido claro con sus ayudantes: si responde bien en las próximas sesiones, viajará a Milán. El alemán quiere contar con todas sus armas para tumbar al Inter. Y esta, aunque escondida, puede ser la más decisiva.
No es solo su capacidad goleadora. Su presencia altera el planteamiento defensivo del rival. Simone Inzaghi deberá adaptar su plan si sabe que puede entrar desde el banquillo.

El efecto psicológico en el rival
Más allá del juego, hay un factor emocional en juego. Ver a esta figura calentar en la banda puede ser un golpe para los centrales italianos. Y un impulso para los compañeros, que verían en él una última bala.
La estrategia de Flick pasa por resistir el primer asalto. Si el partido llega abierto al tramo final, esta pieza podría entrar para desequilibrarlo. Con la defensa cansada, su olfato puede marcar la diferencia.

Una conexión que puede reaparecer
Durante la temporada, ha formado una buena sociedad con Lamine Yamal. El joven extremo ha crecido a su lado, aprendiendo a asistir y desbordar con más criterio. Tenerlo otra vez en el área sería una ventaja.
Ferran Torres ha cumplido como falso ‘9’, pero su perfil es diferente. Este regreso aportaría jerarquía, remate y presencia en el área. Un recurso que podría decidir una eliminatoria muy igualada.

En el club son prudentes. No quieren generar presión ni expectativas exageradas. Pero internamente, ya preparan el terreno para su regreso.
La Champions no espera a nadie. Y el Barça necesita todo lo que tenga para estar en la final. Por eso, si nada se tuerce, el “arma secreta” de Flick tiene nombre y apellido: Robert Lewandowski.