El FC Barcelona sigue trabajando con discreción pero máxima urgencia en el mercado de fichajes veraniego. El objetivo prioritario ahora está en la defensa, y más concretamente en el lateral derecho del equipo. Joan Laporta y Deco estudian una incorporación estratégica que podría cerrarse en cuestión de días.
El jugador en cuestión lleva tiempo en la órbita azulgrana, aunque no ha sido hasta ahora cuando ha habido movimiento real. Hansi Flick ha dado luz verde, y el interés del futbolista por vestirse de blaugrana es total. A estas alturas, lo único que frena la operación es el encaje económico y la necesidad de liberar fichas.
Deco trabaja en varias salidas para generar espacio, tanto en el vestuario como en el límite salarial de LaLiga. Hay hasta tres nombres sobre la mesa que podrían marcharse de forma inminente: Oriol Romeu, Iñaki Peña y Andreas Christensen. Su salida permitiría ejecutar una de las operaciones más estudiadas en los últimos meses.
Un fichaje exprés con fecha límite
El jugador tiene una cláusula liberatoria en vigor que puede facilitar mucho el fichaje en estos momentos. Se trata de una oportunidad de mercado que solo estará disponible hasta el 31 de julio, según lo pactado con su actual club. A partir de agosto, el precio podría subir o el jugador podría desaparecer del radar definitivamente.
El Barça no quiere dejar escapar la ocasión, pero necesita moverse con rapidez para no quedar fuera de la puja. El entorno del futbolista ha trasladado al club catalán su predisposición a esperar hasta esa fecha concreta. No obstante, otras entidades europeas también están al acecho, lo que añade presión al asunto.
Si se ejecuta ahora, la operación tendría un coste de 25 millones de euros, asequible dentro de los estándares actuales. El club baraja diferentes fórmulas para cerrarla sin comprometer la planificación general del verano. El cuerpo técnico, mientras tanto, insiste en que esta llegada es “imprescindible” para poder competir con garantías.
Un perfil que encaja con Flick
El jugador gusta mucho al nuevo técnico, sobre todo por su potencia física y su profundidad ofensiva por banda. Su llegada permitiría devolver a Jules Koundé a su posición natural como central, mejorando el equilibrio defensivo. Además, es internacional con experiencia y ha disputado grandes torneos con su selección nacional.
Los informes que maneja el cuerpo técnico avalan su nivel tanto en fase ofensiva como en tareas de recuperación. Su versatilidad también permitiría que pudiera actuar en esquemas con defensa de tres o como carrilero largo. Flick considera que encaja perfectamente en su modelo de juego y lo ve titular a corto plazo.
El salario que percibiría en el Barça sería muy similar al actual, aunque algo ajustado al tope salarial. Actualmente, en el Inter de Milán cobra cerca de 3 millones netos por temporada, que en bruto rondan los 6 millones. El Barça le ha ofrecido una cifra muy próxima, con variables por rendimiento que podrían elevar su ficha total.
Dumfries espera la llamada de Deco
El protagonista de esta operación no es otro que Denzel Dumfries, lateral derecho del Inter de Milán. El neerlandés tiene clara su voluntad: quiere fichar por el Barça este mismo verano y está dispuesto a esperar. Así se lo ha hecho saber a su entorno más cercano, convencido de que encajará en el proyecto culé.
Dumfries cree que es el momento ideal para dar el salto a LaLiga y luchar por títulos con regularidad. Sabe que el Barça le necesita y que puede ser importante desde el primer día en el esquema de Flick. Deco tiene solo hasta el 31 de julio para ejecutar la operación y convertirlo en el nuevo lateral derecho del equipo.