Tras el empate ante el Celta en Balaídos, las redes sociales se han encendido con inmensas dudas con el técnico azulgrana y con los jugadores de la plantilla. Un empate que fue doloroso para el equipo debido a la forma en como sucedió todo, Un error, una expulsión y un partido que iba 2-0 acabó en un empate doloroso.
Bajón de forma para los de Flick.
Hansi Flick al salir del partido y acudir a la rueda de prensa del postpartido dejó muy claro su cabreo con él mismo y con sus jugadores. El técnico alemán consideró que no estar al 100% concentrados era una falta de respeto absoluta a los aficionados y sobre todo al escudo. La mano dura ya se ha notado esta semana con sesiones dobles de entrenamiento con mucho trabajo, autocrítica y esfuerzo a realizar.
Parte de la afición aprovechó el bache del equipo azulgrana para poner en duda la figura de Flick y jugadores que hasta el momento estaban protagonizando un gran momento de forma. Y es que también hay que ser realistas y aceptar que el Barça desde la segunda parte ante el Español bajó su rendimiento muy por debajo del nivel ofrecido. De los 4 partidos jugados en noviembre, el Barça solo ha ganado dos, y eso preocupa a más de uno.
Calma y relax para no cometer los mismos errores.
Pero la calma es la mejor aliada en momentos como estos, y no es para menos después de ver el gran trabajo que está haciendo Flick en el club azulgrana. Después de aprender la lección con Xavi, teniendo en cuenta que estando todos unidos y hacia una misma dirección, las cosas van mucho más mejor. Así que sí, el Barça está en un mal momento, pero eso no quiere decir que tengamos que machacar tanto a jugadores como al entrenador cada vez que se cometan errores.
Un Barça que ha derrotado y goleado tanto a Real Madrid y a Bayern de Múnich no puede ser un Barça malo.
Y es que el diagnóstico es claro y conciso. El Barça de Flick está teniendo el típico bache de equipo grande. Un bache por el cual han pasado todos los equipos campeones y que el Barça tampoco se iba a librar.
Así que la hoja de ruta es clara, calma, paciencia y a apoyar a uno de los mejores Barça en años. Porque sí, hacía tiempo que el equipo no estaba en un estado tan bueno y tan bonito, y seguro que el bache no durará ni dos semanas.