No todos los canteranos encuentran su lugar en el primer equipo, y ocurre incluso con los más queridos. A pesar de rendir bien en el colectivo y acumular títulos, su historia ha quedado en la sombra. Esta temporada no encontró minutos y decidió poner su futuro por delante.
El jugador al que Flick siempre recomendó no logró hacerse con hueco alguno en la rotación habitual. La competencia en su posición ha sido feroz, y la caída del filial alargó la agonía competitiva. Al final, la falta de oportunidades aceleró su salida inevitablemente.

El club acepta su marcha para no frenar su progresión
El fichaje profesional nunca llegó y la categoría baja fue clave.
Desde que se incorporó al primer equipo, generó grandes expectativas y atención. Demostró su calidad, visión de juego y compromiso evidente en cada sesión de entrenamiento. Pero no debutar ni un minuto le pasó factura y su carrera quedó bloqueada de raíz.
El filial descendió a Segunda RFEF, y competir en esa categoría es inviable para un talento con su proyección. El jugador busca mantener ritmo competitivo y desarrollo constante de forma urgente. Por todo ello, encontrar una salida adecuada se convirtió en una prioridad compartida.
Dos grandes de Europa presentan ofertas claras
La Bundesliga y la Premier League apuestan fuerte por su talento.
La Bundesliga llama con fuerza en su mercado estival, y su nombre aparece en dos clubes de primer nivel. El Borussia Dortmund ya ha formalizado una propuesta seria para incorporarlo este mismo verano con un rol importante. No sólo lo ven como un relevo, sino como un jugador titular que pueda crecer y aportar desde el primer día.
También el Liverpool muestra un interés sólido, seducido por un perfil joven y explotable a largo plazo. Si bien esta operación sería más compleja por plantilla y presupuesto, consideran que vale la pena adquirirlo para pulirlo en su modelo. En ambos casos contará con apoyo total si acepta la oferta.

Salida pactada con cláusula de recompra
Flick avala su marcha y reclama control sobre su trayectoria.
El Barça está dispuesto a facilitar su salida definitiva siempre que incluya una cláusula de recompra inteligente y económica. Flick dio el visto bueno a esta operación pensando en su crecimiento fuera del Camp Nou. Prefiere verlo triunfar en otro sitio antes que quedarse estancado sin minutos.
El club confía en que este acuerdo sea beneficioso a medio plazo si el jugador alcanza su potencial. El jugador ha mantenido la discreción, entrenando a diario sin provocar ruido mediático. El vestuario lo lamenta profundamente, ya que era uno de los futbolistas más queridos en el vestuario.

Adiós sin debut oficial pero con esperanza de regreso
Su historia en el Barça no terminó como esperaba, pero mantiene ilusión.
Nunca llegó a vestirse de azulgrana en partido oficial, pero su sueño sigue vivo. Originario de Alemania, desembarcó en la Masía en 2023 como una de las apuestas más prometedoras del club. Ahora su futuro apunta al Borussia Dortmund o al Liverpool, donde recibiría minutos y un rol protagonista para demostrar su valía.

Se marcha con la esperanza de regresar algún día al club que le formó y adoptó, y esta vez quedarse de forma definitiva. Pero por ahora, la mejor opción para su carrera pasa por asumir un rol de protagonismo en un entorno distinto. El protagonista de esta historia es Noah Darrivich, el talentoso mediapunta que Flick siempre defendió con cariño.