Un jugador de fútbol con el logo del Paris Saint-Germain de fondo.

Bombazo, Luis Enrique lo ha echado del PSG: El Barça se lo lleva, mejor que Raphinha

La situación es límite: ha perdido protagonismo y el Barça estudia un golpe de mercado inesperado

El mercado sigue su curso y en el Barça están muy atentos a los movimientos de los grandes europeos. Deco y su equipo tienen claro que la plantilla necesita retoques, aunque no se harán locuras. La prioridad es reforzar los extremos, especialmente tras la salida de Vitor Roque y la lesión de Ferran Torres.

Hansi Flick quiere competencia real en banda izquierda, alguien que pueda alternar titularidad con Marcus Rashford. El inglés ha llegado con la vitola de estrella, pero su estado físico aún genera ciertas dudas. Por eso, Deco rastrea el mercado en busca de un perfil joven, rápido y con desequilibrio.

En ese proceso ha surgido una oportunidad inesperada desde París, y el Barça no la quiere desaprovechar. En el PSG hay malestar con un futbolista que ha ido perdiendo protagonismo con el paso de los meses. Aunque empezó bien, ha terminado siendo un suplente habitual y su relación con el técnico no es la mejor.

Un hombre gesticula mientras habla en un evento deportivo, con dos personas en el fondo.
Hansi Flick | @FCBarcelona

Un jugador señalado por Luis Enrique

Luis Enrique no ha escondido su malestar con el rendimiento del jugador, al que considera poco comprometido. En algunos entrenamientos, su actitud ha dejado mucho que desear y eso no ha gustado en el cuerpo técnico. El español quiere perfiles más fiables y que se adapten a su idea de presión constante.

Desde el entorno del jugador reconocen que no se siente cómodo en París y estaría dispuesto a buscar una salida. Con apenas 21 años, quiere minutos y continuidad para seguir creciendo, algo que ahora no tiene en el Parque de los Príncipes. Su entorno ya ha empezado a moverse y el Barça ha recibido la información.

El club azulgrana ve en él una oportunidad de mercado, especialmente si el PSG acepta una cesión con opción de compra. Flick cree que podría ser útil por su capacidad de desborde, potencia física y hambre por destacar. Además, sería una operación de bajo riesgo económico, algo fundamental en el contexto actual.

Luis Enrique psg
Luis Enrique | @PSG_espanol

Un perfil que encaja en el proyecto del Barça

Desde la dirección deportiva valoran que ya tiene experiencia en Champions y en una liga de primer nivel. Su explosividad en el uno contra uno lo convierte en un recurso ideal para partidos cerrados y defensas replegadas. Además, puede jugar tanto por izquierda como por derecha, algo que Flick valora muy positivamente.

Los informes internos son muy favorables y se cree que, en un entorno más tranquilo, puede explotar su talento. En París ha estado bajo presión desde el primer día y eso no le ha ayudado a rendir como esperaba. En el Barça, podría encontrar un ecosistema más propicio para brillar y desarrollarse.

Aunque el club catalán no puede permitirse grandes fichajes ahora, sí contempla movimientos estratégicos como este. La clave será la voluntad del PSG de negociar y, sobre todo, la predisposición del jugador a cambiar de aires. Y todo indica que, si la oferta llega, la escuchará con mucha atención.

Deco, director deportivo del Barça, en una rueda de prensa
Deco | @deco_official

La joya francesa en la rampa de salida

El protagonista de esta historia es Bradley Barcola, extremo zurdo del PSG, que ya ha sido ofrecido al Barça. El joven internacional francés no entra en los planes prioritarios de Luis Enrique y busca una salida para relanzar su carrera. Y en Can Barça ven la ocasión perfecta para pescar en río revuelto.

Barcola llegó al PSG como una promesa procedente del Olympique de Lyon, pero nunca terminó de consolidarse en París. Su velocidad, regate y perfil zurdo lo convierten en un complemento ideal para Rashford y Lamine Yamal. Si el Barça mueve ficha, podría cerrar una incorporación estratégica sin grandes desembolsos.

Deco ya tiene el nombre subrayado en rojo. El Barça espera al momento justo para actuar. Porque a veces, cuando un entrenador cierra la puerta… otro la abre de par en par.