El Barça está moviéndose con rapidez en los despachos. La dirección deportiva de Joan Laporta y Deco avanza con decisiones que buscan equilibrar la plantilla y, al mismo tiempo, reforzar zonas clave. Una de esas maniobras está a punto de cerrarse: el intercambio de Eric García por uno de los grandes talentos de la Real Sociedad.
El central catalán ha perdido protagonismo esta temporada. Aunque su polivalencia le ha permitido mantenerse como una opción útil para Hansi Flick, no ha logrado consolidarse como un titular fijo. El club, consciente de ello, ya le ha abierto la puerta de salida… pero con una estrategia muy clara.

Eric, moneda de cambio
La Real Sociedad lleva meses siguiendo de cerca a Eric García. Imanol Alguacil lo considera una opción ideal para apuntalar su defensa, especialmente si se concreta la salida de uno de sus zagueros actuales. Ya en enero intentaron llevárselo cedido, pero el Barça no quiso desprenderse de él a mitad de curso.
Ahora, con la planificación de la próxima temporada ya en marcha, las conversaciones han avanzado. Y el Barça ha puesto sobre la mesa una propuesta que podría resolver necesidades para ambas entidades. Un trueque con nombre propio que tiene el visto bueno de Flick y que solo necesita los últimos retoques para cerrarse.

El movimiento incluye a una de las grandes estrellas de la Real Sociedad. Un futbolista que ha sido clave en la gran temporada del equipo vasco. El Barça lo sigue desde hace meses y considera que encajaría perfectamente en el esquema de Hansi Flick.
Es rápido, desequilibrante y con gran capacidad para desbordar en el uno contra uno. Además, ya conoce LaLiga, tiene experiencia internacional y su proyección sigue en crecimiento. En el vestuario culé lo ven como un refuerzo ideal para sumar dinamismo y profundidad al ataque.
El técnico alemán lo ha señalado como uno de sus objetivos. Quiere más recursos en los extremos, y el jugador en cuestión cumple con todas las condiciones.

Dos vías abiertas para el acuerdo
La operación contempla dos posibilidades. La primera sería una cesión con opción de compra obligatoria para Eric García, lo que permitiría liberar masa salarial y facilitar el fichaje del extremo. La segunda, más directa, sería un intercambio con ajuste económico de por medio.
El valor de Eric ronda los 15 millones de euros. El de la estrella de la Real Sociedad, aproximadamente el doble. Pero en los despachos culés creen que incluir al defensa como parte del trato puede reducir considerablemente el coste de la operación.
Además, Eric ya ha sido informado y no vería con malos ojos una salida. En el Barça no tiene minutos garantizados y en San Sebastián podría ser titular desde el primer día.

El nombre del futbolista que llegará al Barça es Takefusa Kubo. El extremo japonés es el jugador que más gusta a Flick y el que más ilusiona en los despachos. Ha explotado definitivamente en la Real Sociedad y su valor se ha disparado esta temporada.
Kubo puede jugar en ambas bandas, tiene desborde, gol y mucha personalidad. Con solo 23 años, ya ha demostrado que puede marcar diferencias en partidos grandes. Y en el Barça, llegaría para competir directamente con Raphinha o incluso acompañar a Lamine Yamal en el once.
La Real no quiere desprenderse de él, pero el ofrecimiento de Eric García y la necesidad de equilibrar cuentas podrían abrir la puerta.

Un trueque que genera oportunidades
Con esta operación, el Barça no solo refuerza su ataque, también libera espacio para otros movimientos. La salida de Eric permitiría buscar un central de perfil físico o incluso un lateral derecho. Además, se ajusta a la política de sostenibilidad del club: incorporar talento contrastado sin grandes desembolsos.
Si no hay contratiempos, el acuerdo se cerrará antes del final de temporada. Flick ya ha dado su aprobación y Deco está al frente de las últimas conversaciones. El Barça ha encontrado una solución inteligente: transformar la salida de un jugador sin minutos en la llegada de un refuerzo estratégico y diferencial.