La historia de Ansu Fati con el FC Barcelona se apaga poco a poco. Tras varias oportunidades sin consolidarse, el extremo ha quedado relegado al banquillo. Hansi Flick no cuenta con él y su salida era cuestión de tiempo.
Jorge Mendes, su agente, se ha reunido en las últimas semanas con Deco y Joan Laporta para resolver su futuro. El objetivo era encontrar un destino que garantizara minutos y confianza para el jugador. El técnico alemán ha sido claro: no entra en sus planes ni como revulsivo.

Reuniones discretas, pero decisivas
Las conversaciones entre Mendes y el Barça se han acelerado en este mercado. La falta de protagonismo de Ansu ha sido evidente desde la pretemporada. El club entiende que su progresión necesita un cambio de aires inmediato.
Con apenas 21 años, aún hay margen para relanzar su carrera en la élite. La clave era encontrar un club europeo de alto nivel dispuesto a confiar en él. Y, sobre todo, que ofreciera minutos reales en un proyecto competitivo.

En el Camp Nou no solo se piensa en dar salida, también en reforzar zonas concretas. La banda izquierda necesita profundidad y desequilibrio desde hace tiempo. El perfil ideal sería un jugador joven, con margen de mejora y experiencia en la élite.
Por eso, ante la oportunidad de un intercambio, Deco valoró opciones con varios clubes. Una de ellas vino directamente desde París. El PSG, que ha tenido movimientos internos en su plantilla, ofreció un nombre que encajaba en los planes de Flick.

Un talento en crecimiento
En el Paris Saint-Germain hay un futbolista que ha ganado peso en los últimos meses. Joven, veloz, con desborde y mucha proyección. El Barça ha seguido su evolución desde que brillara en el Lyon.
Su estilo encaja con lo que busca Flick: verticalidad, capacidad de desequilibrio y compromiso táctico. Además, su juventud permite pensar en una adaptación rápida. Aunque no ha sido titular indiscutible en París, su potencial está fuera de toda duda.
El Barça considera que puede ser una de las sorpresas positivas de la próxima temporada. Rodeado de jóvenes como Lamine Yamal, Fermín o Gavi, podría explotar definitivamente.

El PSG acepta negociar
Desde el club francés han visto con buenos ojos la posibilidad de incorporar a Ansu Fati. Consideran que puede aportar variantes ofensivas y recuperar su mejor nivel fuera del foco mediático de Barcelona.
Luis Enrique, que ya lo tuvo en la selección, habría dado luz verde a su llegada. La operación se ha articulado como un intercambio puro, sin pagos adicionales. Un movimiento estratégico que permite a ambas entidades cubrir necesidades sin comprometer el fair play financiero.
Ansu se reencontrará con un técnico que cree en él y tendrá la oportunidad de demostrar que todavía puede ser decisivo. En París, la presión es distinta y tendrá más margen de maniobra.

Acuerdo cerrado, intercambio oficial
Finalmente, el intercambio ha quedado sellado. Ansu Fati se marcha al Paris Saint-Germain y, a cambio, Bradley Barcola llegará al FC Barcelona. Un trueque que satisface a todas las partes y que será anunciado oficialmente en los próximos días.
Para Ansu, es una nueva oportunidad de relanzar su carrera. Para el Barça, la llegada de Barcola supone aire fresco en una posición clave. Y para Flick, una herramienta más en su proyecto deportivo.
Laporta y Deco consideran que es una de las mejores operaciones posibles en este momento. La plantilla gana profundidad sin asumir grandes riesgos. Y Barcola, por fin, cumplirá su sueño de vestir de blaugrana.