Un gran Barça destrozó el Real Madrid delante de un Estadi Olímpic de Montjuïc con más de 38 mil personas
Ganar el Clásico es un clásico. El Barça no solo goleó, si no que aplastó el Real Madrid con un marcador final tan icónico como lo es un 5 a 0. Las de Jonatan Giraldez se sobrepusieron a un buen inicio del Madrid con varios ajustes en el campo, donde Aitana, Mariona y Hansen fueron claves.
Los primeros instantes del partido fueron blancos. El Barça salió con una marcha menos, y las de Toril plantearon un escenario difícil para las blaugrana. El los primeros 15 minutos se jugó muy cerca de Cata Coll, con un Barça con mucho problemas para salir con la pelota controlada.
Cuando las de Giráldez empezaron a tener la posesión fue cuando se inauguró el marcador. Ipso Facto. Un desplazamiento de banda a banda llegó a Hansen, quien destrozó la banda izquierda del Madrid con el apoyo de Bronze. El balón volvió a la noruega para que ésta lo filtrara hasta Aitana en la frontal. En ese contexto, solo pueden pasar cosas buenas, y así fue. La balón de oro tejió un pase a la red con su pie izquierdo, imposible para Misa. ¿Quién mejor para anotar el primer gol en Montjuïc?

Beso al escudo de la de siempre. FUENTE: @FCBFemení
El dominio fue in-crescendo, y el Barça perdonó, por extraño que suene. Aitana se encontró con el poste, y Salma remató fuera un uno contra uno clarísimo ante Misa. Patri también tuvo el gol a tocar, después de recoger un centro de Hansen. La extremo noruega vino al Estadi Olímpic disfrazada de sastre, pues le hizo un traje a Ivana Andrés antes de ese centro, y otro a Olga Carmona antes de estrellar una rosca al larguero.
Las gradas de Montjuïc casi desesperan cuando vieron que Salma fallaba otro uno contra uno y Hansen, a sin portera en la portería, mandaba el balón por encima del larguero. Pero quien la sigue la consigue. Las dos mismas jugadoras protagonizaron el segundo gol. Salma disparó con rabia al larguero desde la frontal y, esta vez sí, Hansen cazó el rechace para batir a Misa.
Antes de desfilar para los vestuarios hubo aún tiempo para el tercer gol, y desatar la fiesta en Montjuïc. Una serie de centros en el área terminaron con el balón muerto a pies de Mariona, que hizo lo que mejor sabe hacer: pausar el tiempo. Solo ella era capaz de ver una rosca perfecta hacia la escuadra, entre un bosque de piernas blancas, y así lo hizo.

Mariona celebrando su gol. FUENTE: @FCBFemení
El segundo tiempo evidenció un Barça más tranquilo, sin prisas, con un Madrid más ordenado y con piezas nuevas. Sin embargo, Salma tuvo un nuevo uno contra uno para añadir un gol más al marcador, pero esta vez fue Misa con una gran estirada para evitar males mayores.
Un periodo sin mucho que contar más que el dominio arrollador del Barça. Durante 40 minutos el público se distrajo a base de cánticos y olas, en un ambiente lúdico y festivo. Poco destacable en el verde hasta el descuento, donde dos recién ingresadas le han puesto la guinda al Clásico. Una culé de cuna como Claudia Pina estuvo en el sitio ideal para empujar una gran asistencia de Aitana. Y para culminar la manita, Vicky se convirtió en la goleadora más joven de la historia de los Clásicos, sean masculinos o femeninos.
Golpe en la mesa del Barça que se aleja a 6 puntos de su máximo competidor. Parece que todavía no hay color entre las blaugranas y el Real Madrid, pese a todo el márqueting que levantaron las blancas hablando de una nueva era en el fútbol español.