El Barça afrontaba el duelo ante la Real Sociedad teniendo en cuenta las dificultades que plantearon las ‘txuriurdin’ en su última visita al Johan. Natalia Arroyo tejió un excelente planteamiento, y por poco se lleva puntos de Barcelona. Hoy no fue así. Jonatan Giráldez le ganó la partida a la catalana y el resultado se vio reflejado en el luminoso. Después de 38 disparos, el Barça dejó el marcador en 3-0.
El entrenador blaugrana rotó poco respecto al jueves pasado. El más significativo fue el cambio en la portería: Cata Coll fue hoy la guardiana culé. Ante ella, Irene Paredes y Mapi, Bronze por la derecha y Ona Batlle que hoy partió por el carril izquierdo. El centro del campo se mantuvo intacto con respecto al Valencia: Patri repitió de pivote, con Aitana y Mariona. Y en ataque, Hansen, Alexia y Pina.
Un inicio fulgurante del Barça propició una primera diana tempranera. Hansen aprovechó un rechace muerto en el área pequeña tras un disparo de Mariona para abrir el marcador. A parte del gol, la noruega fue la gran protagonista del ataque blaugrana en la primera parte con grandes internadas y hasta cuatro disparos a puerta.

Si no hubo más goles en la primera parte fue por culpa de dos personas: la portera donostiarra Elene Lete, que detuvo varios disparos claros a Aitana, Alexia y Hansen; y Natalia Arroyo. La técnica catalana detuvo las oleadas blaugranas a la media hora de juego mediante ajustes en su planteamiento.
El segundo periodo empezó con la misma dinámica del inicio del partido: un Barça super dominador y vertical encerró a la Real prácticamente en su área. Gracias a ello llegó el segundo gol culé. Aitana se anticipó en presión alta y conectó en el área con Alexia. La de Mollet del Vallés tuvo sangre fría para recortar cerca del área pequeña y disparar fuerte y raso para batir a Lete.
El dominio del Barça permitió a Giráldez hacer cambios para dar oxígeno, y coincidieron por primera vez las tres pivotes naturales sobre el terreno de juego: Engen, Patri y Walsh. Una situación que el técnico blaugrana comentaba en rueda de prensa que era para aportar más control al equipo.
De hecho, fruto de una de las pivotes nació el tercer y definitivo gol. Keira Walsh, que reaparecía tras lesión, tuvo un rol más móvil y cercano al área de lo habitual. En una de sus apariciones, ganó la banda derecha y puso un centro raso y tenso para que Hansen solo tuviera que empujarla.
Con el 3 a 0 se llegó al final del partido. Un partido sólido del Barça pese a que llegó a disparar 38 veces. Nueva victoria del Barça que sirve para reforzar su liderato al frente de la Liga F. La primera prueba de fuego llega la semana que viene con la visita al Atlético de Madrid.