La palabra austeridad ya no es novedad en la Ciudad Condal. Luego de las consecuencias económicas de la pandemia y la nefasta administración de Bartomeu, el club quedó sumido en una crisis financiera sin precedentes. Esto obligó al Barça a vender algunos de sus activos el pasado verano. La famosos “palancas” fueron necesarias, pero no suficientes para volver a la normalidad.
Si bien el primer equipo del Barça había sido hasta el momento el más constreñido por la escasez de recursos, ahora se ha decidido que el impacto económico se vaya repartiendo entre las demás secciones para terminar de sacar a flote al fútbol masculino, que es, además, por mucho el que más recursos genera. La salida de Mirotic responde ni más ni menos que a esa lógica de austeridad generalizada.
El caso Mirotic
Desde hace un tiempo se venía hablando sobre la posibilidad de que Mirotic y el Barça se replantearan su vínculo profesional. Sin embargo, fue hasta estos últimos días que el adiós del montenegrino se confirmó, al menos de cara al público. Hay que recordar que el contrato Mitoric es uno de los más pesados del baloncesto europeo y que la masa salarial de las secciones profesionales computan para la masa salarial de La Liga.
Según fuentes del club, después de la Final Four de la Euroliga, el Barça le comunicó al agente del jugador que se buscara un nuevo equipo. Esto con la intención de que Mirotic tuviera suficiente tiempo para resolver su futuro y encontrar un contrato a la altura que, en tiempos de austeridad, el Barça no se puede dar el lujo de ofrecer.
Barça-Madrid de Liga Endesa
El caso Mirotic salió a la luz justo en la previa de las finales de la Liga ACB entre el Barça y el Madrid, luego de que el jugador hiciera un gran trabajo en los playoffs. Sin embargo, esto no pareció afectar a los de Saras. El equipo salió del Palau con una ventaja de 97-88, a pesar de decisiones arbitrales polémicas que habían adelantado al Madrid en un inicio. De cara al próximo encuentro del miércoles, el Barça ya parte con la balanza a su favor y un cuadro azulgrana más que motivado.
Con todo y la victoria, uno de los momentos de la final se vivió cuando la grada ovacionó al capitán, Nikola Mirotic, en señal de desaprobación a la decisión de la junta directiva. El jugador firmó un gran encuentro, sentenciando el partido en los compases finales. Sin duda, el montenegrino partirá del Barça siendo uno de los referentes equipo, siendo la noche de ayer una prueba de su compromiso con el club, áun en medio de la polémica alrededor de su continuidad.
Austeridad para alcanzar la normalidad
A pesar de críticas aisladas, hasta el momento el trabajo de la directiva sigue siendo sobresaliente, logrando reducir de forma descomunal la masa salarial. Especialmente relevante es el caso del futbol masculino donde la reducción se ha dado ha pasos agigantados. Con el trabajo de Joan Laporta, Mateu Alemany y el resto de la directiva, el primer equipo ha pasado de tener una masa salarial de 656 millones de euros a una de 480 millones, en poca más de un año.


La intención es seguir reduciendo esa cifra, pero aplicando recortes similares en el resto de las secciones, entre ellas la de basket, las cuales repercuten de la misma manera en el balance general del club. El objetivo es claro: que el futbol masculino pueda tomar un respiro, sanear sus cuentas y hacer las inversiones necesarias de cara a las próxima temporada. Así, jugadores que siguen siendo interesantes a nivel deportivo, como el propio Mirotic, el caso Messi en el futbol masculino u otros en las diferentes secciones, son puesto en libertad al no ser sostenibles para la situación económica del Barça.
Soluciones
Hacer recortes económicos en las diferentes secciones del Barça es una medida impopular. Sin embargo, es también una medida imperativa ante la situación económica actual en la que el equipo masculino necesita sanear cuentas e invertir para no quedarse atrás en el contexto de un mundo fútbol que se ha plagado de jeques sin límites financieros.
Una vez la situación económica de la fuente principal de ingresos del Barça se consiga sanear, el resto de las secciones se verán igual de beneficiadas y los éxitos vendrán de la mano, tal y como sucedió en 2009 cuando el equipo de baloncesto y de balonmano del Barcelona ganaron su respectiva copa europea junto con el equipo masculino de futbol.