El campeón de la Supercopa se ha medido al Getafe, ganando por la mínima, en un partido que nada tuvo que ver con la pasada victoria del título español. Damos un vistazo.
Barça en Números
El Tiro
Una victoria siempre es una buena noticia. No obstante, en el Barça nos importa el “cómo”. El equipo azulgrana generó 8 tiros, de los cuales 5 fueron al arco. Sin embargo, no representaron ningún peligro para el arco defendido por David Soria: 0.69 xGOT [Probabilidad de gol por tiro].
El Barcelona intentó tiros de larga distancia, teniendo una media de tiro de 19.64 metros, cuando la media del equipo se sitúa sobre los 15.3 metros. 4 de los tiros fueron realizados desde fuera del área.
El Barça no consiguió penetrar el área rival, salvo, por supuesto, la jugada magistral que lo cambio todo.

La Amenaza
El Getafe fue superior al Barcelona en su probabilidad de conversión de goles (1.04 xG), en cambio, el Barcelona fue quien dominó las ocasiones de peligro a través del pase 1.89 (xT). Ahora bien, es inquietante que, tras el gol de Pedri, haya sido el Getafe el que creo la mayoría de las acciones de peligro.
Es importante ver el efecto de los cambios, justo en el minuto 62, cuando Kessié entra en lugar de Raphinha, el Barcelona pierde el control del partido en los siguientes 10 minutos y uelve a suceder sobre el minuto 77, cuando se dan los cambios posteriores. Lo de los cambios es para hacérselo mirar.

El Pase
Como comenté, el equipo fue uno antes del gol, y otro distinto luego de la salida de Raphinha. La estructura del equipo era sólida, incluso con un Ansu en una posición más profunda, línea defensiva sobre el campo rival y los interiores cerca de los extremos.
Luego, el caos. A partir del minuto 62, el Barcelona pierde completamente el juego interior. Pedri actúa aún más retrasado que Busquets y Ter Stegen comienza a ser un recurso de pase. Estructuralmente quebrado, el equipo no puede generar acciones de peligro ni amenazas reales.

Koundé
Si la primera parte nos regaló un estratosférico Christensen, Koundé fue determinante en la segunda mitad para que el equipo se mantuviera en pie. Jules lo sostuvo defensivamente y, además, fue quien ayudo a construir, siendo el jugador con mayor impacto en el pase (0.33 xT).
Jules Koundé terminó con 9 recuperaciones, 2 defensas aéreas, 1 intercepción, 2 despejes, 74 conducciones, 125 pases (93.6%) y 9 pases progresivos. Fue el MVP del partido, pese a que La Liga se lo otorgara a Busquets, quien en los minutos finales daba más temor que seguridad.
